Accidente de auto persona borracha

¿Qué hago si me chocan y la otra persona está alcoholizada?

Si bien existen normas que prohíben conducir en estado de ebriedad, este tipo de accidentes es de los más comunes a nivel mundial. La ley de tránsito es clara al respecto, si una persona consume alcohol no debería manejar un vehículo, ya que no cuenta con los reflejos que se requieren para hacer las maniobras correctas. En este artículo te explicamos qué hacer si te chocan y la otra persona está alcoholizada. 

¿Qué podemos hacer si nos chocan y la otra persona está alcoholizada?

Lo primero que siempre recomendamos como especialistas en accidentes y en siniestros es mantener la calma. Darnos unos minutos luego de recibir el impacto para mirar alrededor para discernir lo ocurrido y los daños que pudieran devenir del incidente.  

Luego, hacer las llamadas pertinentes a los organismos de asistencia tales como: SAME, policía y bomberos. Permitir a las autoridades y organizaciones capacitadas para actuar en accidentes hacer su trabajo. Si no tenemos lesiones y podemos valernos por nosotros mismos, podemos tomar los datos de las personas involucradas, de sus vehículos y de las compañías de seguros.

Sacar fotos, hacer filmaciones del sitio, del estado de las unidades impactadas y, si hubiera, también de las edificaciones dañadas. Registrar el día, la localidad y la hora del evento; si hay cámaras que pudieran haber filmado el accidente, testigos, señales de tránsito y el tipo de iluminación artificial si fuera necesario. Esta información se presentará como evidencia a la compañía de seguros para hacer la denuncia o reclamo por el accidente.

¿Quién paga los daños?

Si el test de alcoholemia da positivo, no significa que automáticamente sea el responsable y sea quien debe pagar por los daños ocasionados. Determinar la culpabilidad en un accidente es una tarea que requiere de precisión e investigación profesional. 

La o las compañías aseguradoras que intervienen en el siniestro son las que deben determinar a través del peritaje cómo ocurrió el hecho y quién debe asumir el pago de los daños. En un accidente  pueden intervenir distintas variables: otros vehículos involucrados, acompañantes, peatones, edificios, lesiones físicas y hasta la pérdida de vida de damnificados.

Hay una responsabilidad civil cubierta con el seguro de terceros, pero hay excepciones que se tienen que conocer. En este caso, si el conductor se encuentra bajo los efectos del alcohol, drogas alucinógenas, desinhibidoras o somníferas, las compañías de seguro no pagarán la indemnización. Esto quiere decir que deberá afrontar los costos que correspondan. 

¿Cuáles son los efectos negativos del alcohol en un conductor?

Cuando una persona bebe alcohol, disminuyen las capacidades de movimiento y de la visión. Esto significa que no cuenta con los reflejos necesarios para realizar maniobras, ceder el paso, reducir la velocidad o frenar rápidamente en caso de un choque en cadena. Al no poder responder adecuadamente ante la situación que se presenta, es posible que impacte en otro vehículo, un edificio o bien en un peatón.

Se requiere de un mayor nivel de atención en la noche, cuando circulamos por zonas con poca iluminación, en los días de neblina o lluvia. El alcohol en el organismo de las personas, cuando se consume en cantidad, hace que los reflejos sean lentos, entorpece la capacidad de discernimiento, de estar alerta y de reacción necesarias para conducir.

El conductor ebrio experimenta una falsa sensación de seguridad, exaltación y pérdida de inhibiciones. Cree que puede desempeñar las tareas que implica la conducción de un vehículo, poniendo en riesgo su vida y la de los demás. Las situaciones que más se repiten, en estos casos, es el exceso de velocidad y la falta de uso del cinturón de seguridad producto de ese sentimiento irreal de control.

Si la concentración de alcohol en sangre es igual o supera los 1,2 gramos por litro de sangre, existe el riesgo de que el conductor termine con lesiones graves, con la pérdida de la propia vida y de la ajena. Todos estos son los efectos negativos que producen las bebidas alcohólicas en nuestro organismo y por eso es que la ley indica no conducir si bebimos.

Política de tolerancia cero al alcohol

La probabilidad de accidentes aumentan cuando el conductor se encuentra bajo la influencia de alcohol por todo lo que expusimos. Beber alcohol genera en algunos momentos relajación, por lo que es posible que sin notarlo cierren sus ojos mientras sus manos se encuentren al volante de un vehículo. Este es otro de los peligros que se debate cuando se habla de la política de tolerancia cero de alcohol al volante.

En Argentina, 12 provincias se han sumado a esta normativa, por lo que los conductores que transitan por Córdoba, Buenos Aires, Tucumán, Salta, Santa Cruz, Tierra del Fuego, Río Negro, Chaco, Chubut, Entre Ríos, Jujuy y La Pampa, deben saber que no está permitido conducir vehículos luego de beber alcohol. 

Las sanciones penales previstas para quienes no cumplan con esta normativa varían dependiendo de la cantidad de alcohol en sangre detectada en los test de alcoholemia. Entre las penalizaciones se establece la inhabilitación para conducir (de 3 a 18 meses), multas, prisión y asistencia a cursos obligatorios sobre educación vial. 

¿Necesitás asistencia? Podemos ayudarte a resolver tus consultas. Damos asesoramiento legal ante todo tipo de accidentes y siniestros. Llamanos al 011-5246-5000. Estamos disponibles las 24 horas en todo el país.

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